Merzouga – Puerta del Desierto del Sahara
Situado en la parte sureste de Marruecos, Merzouga es una pequeña aldea que sirve como la puerta perfecta para las dunas de Erg Chebbi, uno de los paisajes desérticos más icónicos del mundo. Conocida por sus impresionantes dunas de arena, la vibrante cultura bereber y sus impresionantes puestas de sol, Merzouga ofrece a los viajeros una auténtica experiencia sahariana que es tanto serena como aventurera.
El punto culminante de Merzouga es, sin lugar a dudas, las dunas de Erg Chebbi. Estas imponentes dunas de arena dorada alcanzan los 150 metros de altura y se extienden a lo largo de más de 20 kilómetros. El paisaje es un sueño para los fotógrafos, especialmente al amanecer y al atardecer, cuando los colores de las dunas cambian con la luz cambiante. Los visitantes pueden experimentar el desierto de varias maneras, desde trekking en camello y tours en 4×4 hasta sandboarding y observación de estrellas bajo el cielo claro del desierto.
Merzouga es un centro para aquellos que buscan una auténtica experiencia en el desierto. La zona alberga muchos Campamentos de Lujo en el Desierto y Tiendas Bereberes Tradicionales, donde los visitantes pueden pasar una o dos noches bajo las estrellas. Estos campamentos ofrecen la oportunidad de conectar con el estilo de vida bereber, disfrutar de la deliciosa cocina marroquí y experimentar la tranquilidad del desierto. Por la noche, se puede disfrutar de música bereber alrededor de una fogata y compartir historias con otros viajeros.
Merzouga es el hogar del pueblo bereber, uno de los grupos indígenas de Marruecos. La aldea y sus alrededores están impregnados de tradiciones bereberes, desde su idioma y costumbres hasta su arte y música. Los guías locales a menudo ofrecen fascinantes perspectivas sobre la vida bereber, y los visitantes pueden explorar los mercados tradicionales del pueblo para comprar productos artesanales.
Además del trekking en camello y el sandboarding, hay muchas otras actividades en Merzouga para aquellos que buscan vivir el desierto. Se puede hacer un tour en 4×4 por el desierto, visitar las Oasis cercanas, o hacer trekking por las Gargantas del Todra y el Valle del Dades para explorar los paisajes accidentados de Marruecos.
El mejor momento para visitar Merzouga es durante la primavera (marzo–mayo) y el otoño (septiembre–noviembre), cuando las temperaturas son más suaves y perfectas para actividades al aire libre. El verano puede ser muy caluroso, especialmente en el desierto.